Lección 25: Una Profecía Muy Especial
Referencia Bíblica: Mateo 16:13-20
Versículo de Memoria: “Y yo también te digo, que tú eres Pedro, y sobre esta roca edificaré mi iglesia; y las puertas del Hades no prevalecerán contra ella” (Mateo 16:18).
Hay muchas profecías en la Biblia. Una profecía es un “anuncio”, y hace referencia especialmente a los anuncios de cosas futuras de parte de los siervos de Dios. Hoy no existen profecías nuevas porque Dios ya ha revelado en la Biblia todas las cosas que quiere que sepamos (2 Timoteo 3:16-17; 1 Pedro 1:3; Judas 3).
Una profecía principal del Nuevo Testamento tiene que ver con la iglesia. En Mateo 16, Jesús profetizó que Él establecería Su iglesia. “¿Qué es la iglesia?”. ¡Muy buena pregunta! Aunque comúnmente la gente piensa que la iglesia es el lugar de reunión, esta palabra realmente hace referencia a la totalidad de los seguidores de Jesús que han sido salvos por Él al obedecer lo que Él dice en Su Palabra (Romanos 16:16).
La iglesia es muy importante por varias razones: (1) La iglesia está compuesta de los salvos (Hechos 2:47); (2) Jesús adquirió a la iglesia con Su propia sangre (Hechos 20:28); (3) la iglesia es la esposa de Cristo (Efesios 5:23); (4) la iglesia es única (Efesios 4:4); y (5) Jesús regresará a llevar a Su iglesia al cielo (Juan 14:3; Tito 2:13).
Sin embargo, cuando Jesús estuvo en la Tierra, Su iglesia no existía. Él profetizó: “sobre esta roca edificaré mi iglesia” (Mateo 16:18). El verbo “edificaré” está en tiempo futuro, así que Jesús lo haría en el futuro. Jesús también dijo: “mi iglesia”. Esto significa que la iglesia sería de Él, no de algún otro hombre. Y finalmente, Jesús usó “iglesia” en singular, es decir, habría una sola. No serían varias iglesias distintas con nombres distintos; y aunque habría diferentes congregaciones de creyentes en diferentes partes del mundo, todas serían parte de Su iglesia.
¿Cuándo comenzó Jesús Su iglesia? Jesús la comenzó por medio de Sus apóstoles en Hechos 2, en el año 33 (hace algo de 2,000 años atrás), en Jerusalén. Habrás notado que hoy hay muchas iglesias con muchos nombres y enseñanzas diferentes. Tales iglesias tuvieron su inicio en lugares diferentes y fueron fundadas por personas diferentes. Lo cierto es que cualquier iglesia que no haya sido establecida por Jesús, que no siga solamente la Palabra de Jesús en la Biblia, y que no lleve el nombre de Jesús, no puede ser la iglesia que Él prometió establecer.
Jesús prometió a Sus discípulos que Su iglesia comenzaría pronto (Marcos 9:1), y que sería fundada sobre la “roca”—la verdad de que Él es el Hijo de Dios, lo cual Pedro justo había confesado (Mateo 16:16). Su profecía era tan segura que ni aun el poder del Hades (el suceso de Su propia muerte en la cruz) podría impedir tal cumplimiento. ¡Jesús realmente amó y ama a Su iglesia, y nosotros deberíamos estar agradecidos por ella! (Estudiaremos más en cuanto a la iglesia en la Lección 51).
Preguntas
- Según Romanos 16:16, ¿qué nombre llevaban las congregaciones de creyentes en Cristo?
- Hechos 2:47 dice que el Señor añadía a los salvos a Su iglesia. Entonces, ¿puede alguien ser salvo y a la vez no ser parte de la iglesia del Señor?
- Efesios 5:23 dice que la iglesia es la “esposa” de Cristo? ¿Son las esposas importantes para sus esposos? ¿Por qué?
- ¿Podemos ser parte de la iglesia de Cristo si no practicamos y enseñamos la Palabra de Cristo?
- Según el Nuevo Testamento, ¿Quién, cuándo y dónde comenzó la iglesia?
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